María transformó por completo las habitaciones de mis hijos. No solo pensó en la estética, sino también en la funcionalidad: espacios seguros, llenos de color y muy prácticos para el día a día.

Lo que más me gustó fue cómo logró reflejar la personalidad de cada niño en su propio espacio. Ahora mis hijos adoran pasar tiempo en sus cuartos.

Trabajar con María Fernanda fue una experiencia increíble. Logró darle a mi habitación un aire totalmente nuevo, lleno de armonía y estilo. Supo combinar colores, muebles y detalles de una manera que hace que el espacio se sienta más acogedor y elegante al mismo tiempo. Me escuchó en cada paso y plasmó mi esencia en cada rincón. ¡Ahora mi cuarto no solo se ve hermoso, también se siente como un verdadero refugio!

Gracias por transformar mi espacio, y convertir mi cocina no solo en un lugar funcional, sino en ese lugar especial y acogedor, gracias por lograr entender lo que quería y necesitaba y convertirlo en algo aun mejor de como lo imaginaba y soñaba.

Compré una casa antigua llena de encanto, pero necesitaba modernizarla. María encontró el balance perfecto entre mantener el carácter original y darle un aire fresco y actual.

Su gusto impecable y su visión lograron que la casa se sintiera renovada sin perder su esencia.

Contraté a María para coordinar una remodelación completa. Ella no solo diseñó, también supervisó cada detalle como una verdadera directora de obra.

La tranquilidad de saber que alguien con tanta experiencia estaba al frente del proyecto hizo toda la diferencia.

Mi sala y comedor necesitaban un cambio, y María creó un ambiente cálido y moderno al mismo tiempo. Supo combinar piezas nuevas con algunas que yo ya tenía y que eran especiales para mí.

El resultado es un espacio perfecto para compartir con familia y amigos.

Siempre soñé con una cocina práctica y luminosa. María rediseñó todo el espacio, optimizó el almacenamiento y me ayudó a elegir materiales hermosos pero fáciles de mantener.

Ahora cocinar se siente como un placer y no como una tarea.

Trabajar con María fue un proceso sencillo y agradable. Escuchó mis ideas, entendió lo que buscaba y me presentó propuestas que superaron mis expectativas.

Tiene un ojo único para los detalles y una sensibilidad especial para crear ambientes armoniosos.

Necesitaba un espacio de oficina en casa funcional y con estilo. María convirtió un rincón olvidado en un lugar cómodo, elegante y productivo.

Gracias a su diseño, ahora disfruto trabajar desde casa mucho más.

Vivo en una casa con espacios reducidos, pero María logró que cada metro cuadrado contara. Con su creatividad, convirtió áreas pequeñas en rincones prácticos y acogedores.

Su manera de maximizar el espacio es admirable.